Como cada año, acabas de recibir el aviso de que la ITV de tu vehículo está a punto de caducar.
Entonces comienzas a pensar que te tocará pedir unas horas libres en el trabajo, aguantar un montón de colas, gastarte una pasta en arreglar el coche…
Sin embargo, la ITV no tiene que ser necesariamente una fuente de agobios y problemas.
Partiendo de la base de que es una obligación legal que no puedes dejar de cumplir, debes saber que mediante los sistemas de cita previa ahora no hay que esperar tanto como en la época en la que las estaciones de ITV atendían a los coches por riguroso orden de llegada.
La ITV en tiempos de pandemia
Desde que en marzo de 2020 se decretó el estado de alarma en España, el confinamiento obligatorio al que estuvimos sometidos durante varios meses provocó el cierre de las estaciones de ITV (como cualquier otro negocio considerado en aquel momento como no esencial).
Y cuando las ITV volvieron a funcionar, se generó un colapso de coches que tenían la ITV caducada y querían pasarla cuanto antes.
Aquello hizo que el gobierno prorrogase la validez de todas las ITV que hubiesen caducado durante el tiempo que estuvimos confinados. Y en función de la fecha original de caducidad, se establecían nuevos plazos ampliados para volver a pasarla.
Además, las empresas concesionarias de la ITV establecieron unos protocolos internos muy similares en casi todas las estaciones:
- Atender solo mediante cita previa: así se evitan aglomeraciones de personas.
- Obligatoriedad del uso de mascarillas: tanto conductores como empleados tienen que llevarla puesta en todo momento.
- Colocación de mamparas protectoras: en todas las zonas de atención directa a los conductores.
- Uso continuo de geles hidroalcohólicos: para desinfectar manos y superficies que pueden resultar contagiosas.
- Cambio en el procedimiento de inspección: para que el inspector no tenga que entrar dentro del coche ni permanecer junto al conductor sin distancia de seguridad.
Qué puedo hacer si tengo que pasar la ITV en las próximas semanas
Estas son algunas recomendaciones para que el proceso de ITV resulte más rápido y cómodo:
- Acude a la estación más cercana a tu domicilio: si vives en Madrid, elige una estación próxima a tu casa. En la zona sur, por ejemplo, la ITV de Vallecas suele ofrecer buen servicio. Y si resides por la zona norte de Madrid, la ITV de Tres Cantos puede ser una buena elección.
- Evita las horas punta: a primera hora de la mañana, a mediodía, o los sábados, suele haber más demanda, ya que son los momentos en los que más gente tiene tiempo para pasar la ITV.
- Pide cita en las ITV menos congestionadas: en estaciones más alejadas de Madrid, como la ITV de Seseña, suele haber menos afluencia de clientes, sobre todo en horarios laborales.
- Haz una revisión previa en tu taller: antes de ir a la ITV es conveniente que tu mecánico de confianza le haga una revisión a tu coche para detectar posibles averías que darían como resultado una inspección no favorable. Recuerda que en esos casos, la ITV tiene la obligación de retirarte el permiso de circulación hasta que soluciones los defectos. Por eso es mejor subsanarlos antes.
- Lava el coche antes de ir: parece una tontería, pero un coche limpio da la sensación de que el dueño es más cuidadoso. Y esa percepción hará que el inspector se predisponga a tu favor a la hora de considerar la gravedad de los fallos.
- Revisa los limpiaparabrisas y las luces: antes de entrar en la estación de la ITV, comprueba que las luces e intermitentes funcionan correctamente; y que lo mismo sucede con los limpiaparabrisas (asegúrate de tener agua en el depósito, porque tendrás que activar el chorro delante del inspector).
Como has visto en este artículo, pasar la ITV no es tan engorroso como pensabas.
Si vives en Madrid, me gustaría conocer en los comentarios cuál es la estación de ITV que sueles frecuentar y por qué.
Nos leemos.
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